Los buenos traders se diferencian de los que no lo son por su capacidad para manejar sus emociones y administrar el balance riesgo-beneficio, su empeño en seguir aprendiendo cada día, su enorme disciplina y su visión a largo plazo.
Y es que, si algo define a un buen trader es su capacidad para gestionar los tres sentimientos con los que todo inversor tiene que lidiar durante el desarrollo de su ejercicio: el miedo, la avaricia y la euforia.
Algo que tú también puedes lograr a través del psicotrading. Un concepto que todo trader debe conocer a fondo para equilibrar su orden emocional y mejorar como inversor, tanto si quieres comprar criptomonedas, como si te metes en otras operaciones en finanzas..
Psicotrading: ¿qué es?
El psicotrading es la ciencia que estudia el comportamiento de los traders ante sus operaciones de inversión.
Su objetivo es hacer que el inversor sea consciente de sus habilidades y de sus limitaciones para estar en condiciones de gestionar de la mejor manera sus operaciones y evitar que estas se vean afectadas por sus emociones, antes, durante y después de cada operación.
Esta parte de la base de que aprender sobre nosotros mismos y cómo reaccionamos ante determinados escenarios es tan importante como formarse.
La gestión de las emociones en el trading
Son muchos los estudios que han puesto de manifiesto el enorme peso que tienen las emociones a la hora de abrir y cerrar operaciones de inversión.
Desligar las emociones de las inversiones es, pues, capital para tomar decisiones meditadas, reflexivas y racionales, minimizar los riesgos irracionales y, por tanto, mejorar la tasa de éxito.
Una tarea nada sencilla si tenemos en cuenta que los sentimientos son inherentes al ser humano y la cantidad de emociones diferentes que se pueden experimentar durante el trading.
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No obstante, como apuntan varios de estos trabajos sobre psicología y trading, las tres emociones que con mayor frecuencia se les presentan a los inversores durante las jornadas de trading son la euforia, el miedo y la avaricia. Veamos cómo influyen en la toma de decisiones:
Miedo
Presenciar cómo el valor de un activo en el que hemos invertido no deja de bajar y bajar genera miedo.
Esto incrementa los niveles de ansiedad y tensión empujándonos a vender para evitar tener que asumir grandes pérdidas.
En ocasiones ese miedo nos ayudará a controlar las pérdidas de una mala operación, pero en muchas otras nos llevará a abandonar una posición que, a la larga, hubiera generado grandes beneficios.
Euforia
Tan habitual como sentir miedo es sentir euforia. Una sensación que hace acto de presencia en cuanto vemos cómo el valor de alguno de los activos en los que hemos invertido se dispara.
Esta se traduce en una liberación de endorfinas y serotonina que puede conducirnos a tomar decisiones precipitadas como incrementar nuestra posición en lo más alto de una gran vela verde, en lugar de aprovechar para tomar beneficios y recomprar gradualmente en cada uno de los retrocesos que se vayan produciendo.
Avaricia
La avaricia es otro de esos sentimientos que más lastran a los inversores a la hora de tomar decisiones.
Querer posicionarse en todos y cada uno de los proyectos que más prometen a largo plazo o que se dice que están a punto de explotar, así como comprar y comprar aumentando nuestra exposición a un activo para ‘dar un pelotazo’ solo puede salir mal.
Antes de abrir o cerrar ninguna operación es fundamental repetirse que no existe certeza alguna de que el mercado se vaya a comportar tal y como esperamos que lo haga, por muchos indicadores que apunten a que así será. Por ejemplo, ahora con la inflación cambia todo en criptomonedas y el resto de activos.
De hecho, es bastante frecuente que en mercados como el de las criptomonedas, este actúe exactamente en el sentido opuesto al que lo hace el sentimiento generalizado de los traders.
Tan importante como repetirse este mantra es marcarse puntos de toma de ganancias (take profit) y minimización de pérdidas (stop loss) antes de poner en marcha cualquier operación de trading.
¿Cómo gestionar las emociones en el trading?
Como venimos comentando el psicotrading implica conocer las emociones que suelen hacer acto de presencia antes, durante y después de abrir operaciones de inversión y cómo estas se entrometen en la toma de decisiones racionales.
Tal y como suelen repetir una y otra vez en sus ponencias buena parte de los traders más importantes del mundo, para conseguir una tasa de ganancias relevante es esencial diseñar un buen plan de trading y ceñirse a él de manera rigurosa, más allá de nuestros instintos y de las emociones que nos invadan durante el tiempo en el que estemos expuestos a un activo.
Si el plan se ha elaborado teniendo en cuenta los fundamentales, el análisis técnico y las noticias que puedan afectar a su cotización y se colocan puntos de take profit y stop loss teniendo en cuenta todo ello, no hay motivos para que las emociones interfieran en tu operación.
Dicho esto, veamos algunos de los consejos más repetidos por los gurús de la inversión a los traders de nuevo cuño:
Sé humilde
Todo trader disfruta de una buena racha en la que sus inversiones se revalorizan durante varios días.
Eso no significa que la racha vaya a continuar durante el tiempo que esperas o que se vaya a alcanzar tu punto de toma de ganancias. En el mundo del trading, como en la vida, no hay nada 100% seguro.
Desconecta
Algunos mercados, como el de las criptomonedas, no descansan nunca, al estar operativos 24/7/365. Para poder estar en condiciones de abrir y cerrar operaciones razonadas es imprescindible que te tomes descansos durante el día y algunos días libres para desconectar. Muy especialmente si no eres un trader profesional y debes atender otros asuntos.
Sé disciplinado
Tal y como hemos ido apuntando a lo largo de estas líneas, el constante aprendizaje, la constancia y la disciplina son fundamentales para evitar que las emociones se entrometan en nuestros trades.
Ser ordenados y meticulosos, así como mantener un método, es el camino más corto para minimizar riesgos y maximizar ganancias. Los dos grandes retos de todo trader.
Y tú, ¿tienes algún truco más para gestionar tus emociones?
